Cómo fijar las metas de una empresa en un plan de negocios

Establecer las metas de una empresa debería considerarse uno de los puntos claves a la hora de realizar un plan de negocios exitoso.

Dichas metas guían todo negocio exitoso, por lo cual resulta esencial que sean realistas y medibles para que asumas la responsabilidad de su cumplimiento. Al momento de crear estas metas, también debes situarlas dentro de marcos de tiempo razonables, para que tengas una posibilidad real de lograrlas. El presente artículo tratará el tema de qué son las metas, cómo fijarlas, junto con algunos ejemplos y recomendaciones útiles.

¿Qué son las metas empresariales?

Las metas de una empresa de caracter estratégico son aquellas que una empresa se propone y busca alcanzar alcanzar dentro de un plazo determinado (a largo o corto plazo). Establecer una meta empresarial específica establece la dirección de tu empresa. Algunos ejemplos de metas son obtener una participación de mercado específica en un trimestre, adquirir cierta cantidad de clientes en un mes o crear una estrategia de retención de clientes. Lo ideal es que estas metas sean medibles de forma objetiva y que ofrezcan beneficios prácticos. Por ejemplo, una meta de ingresos es medible de manera práctica y objetiva, dado que los ingresos mantendrán tu negocio a flote y podrás medir los buenos resultados por la cantidad de ingresos devengados. Aprende a hacer un plan estratégico para tu negocio

Importancia de las metas en una empresa

Comenzar un proceso de establecimiento de metas es favorable por los siguientes motivos

Proporciona un marco de referencia para el éxito de la empresa

Las metas son importantes ya que ofrecen una forma objetiva de medir el desempeño de tu empresa. Una meta clara describirá de forma efectiva lo que tu empresa debe lograr en un plazo específico. Puedes incluso fijar múltiples metas simultáneamente para establecer el crecimiento que deseas que obtenga tu empresa en cierto periodo.

Cierra la brecha entre el trabajo y los objetivos

Establecer metas empresariales a corto y largo plazo ayuda a motivar a tu equipo y a aclarar sus estrategias. Puedes conectar las actividades habituales de tu equipo con sus propias metas, lo cual contextualizará su trabajo. Es decir, mientras los miembros de tu equipo comprendan mejor cuáles son tus metas y fijen sus propias metas individuales, mejor se desempeñarán debido a que lo entienden con mayor claridad. Teniendo metas objetivamente medibles y alcanzables se aumenta la satisfacción de los empleados una vez que, que su trabajo les motiva e interesa más. Esto afecta de forma positiva al lugar de trabajo y contribuye al crecimiento de tu empresa.

Mantiene alineados a los equipos

Establecer metas comunes fortalece la unidad de los miembros de tu equipo y mejora su moral. Las metas de una empresa que son compartidas también contribuyen a que los líderes de equipo desarrollen estrategias individuales y difundan el plan entre los miembros del equipo. Por ejemplo, puedes dividir la meta de aumentar las ganancias 10% al establecer metas más pequeñas para miembros de varios equipos. Incluso podrías personalizar objetivos más pequeños para cada miembro del equipo. También puedes fraccionar la meta entre ventas y marketing y hacer que ambos equipos creen sus propias estrategias únicas para lograr el objetivo general.

Ayuda a rendir cuentas

Cuando existe una meta empresarial objetiva los líderes de equipo pueden monitorear fácilmente el desempeño individual. Una mayor supervisión ayuda a los líderes de equipo a comprender objetivamente cuáles miembros del equipo se desempeñan mejor y cuáles tienen un desempeño por debajo del aceptable. A partir de allí, los líderes pueden utilizar esta información para contribuir a mejorar a los miembros del equipo cuyo desempeño es más bajo. Por consiguiente, en este caso, las metas financieras son excelentes para mantener la responsabilidad y rendición de cuentas.

Ayuda a tomar decisiones

Los líderes empresariales pueden tomar decisiones más informadas si han fijado objetivos cuyo avance es medible. Por ejemplo, si entre las metas de la empresa está el incrementar las ventas totales en un 30% en un trimestre, la meta después de un mes podría revelar que uno de tus productos vende más que otros. Puedes utilizar esta información para tomar una decisión empresarial informada con el fin de incrementar la comercialización de dicho producto debido a su mayor popularidad.

Tipos de metas empresariales

Hay cuatro tipos principales de metas empresariales: crecimiento, rentabilidad, sostenibilidad y proceso.

Metas de crecimiento

Las metas de crecimiento tienen que ver con el incremento de las ventas, la expansión a nuevos mercados o el lanzamiento de nuevos productos o servicios. Aunque las metas de cada empresa son exclusivas de su propia situación, lograr el crecimiento es vital para que un negocio siga siendo competitivo y prospere a largo plazo.

Metas de rentabilidad

Las metas de rentabilidad se centran en mejorar tus resultados finales disminuyendo los gastos o incrementando los ingresos. El tipo más común de meta de rentabilidad consiste en establecer objetivos de ventas o ingresos. Esto puede implicar el incremento de las ventas generales en un cierto porcentaje, alcanzar resultados mensuales en un cierto porcentaje, obtener objetivos mensuales o trimestrales específicos, desarrollar productos o servicios nuevos o generar más ingresos.

Metas de sostenibilidad

Las metas de sostenibilidad se enfocan en garantizar la viabilidad a largo plazo del negocio y las metas de escala se centran en aumentar la eficiencia operativa. Entre las metas comunes de sostenibilidad se encuentran la reducción del consumo de energía, la disminución de los desechos y el aumento de las tasas de reciclaje. Establecer estas metas puede ayudar a tu empresa a ahorrar dinero a la vez que reduce su impacto ambiental. De igual manera, el logro de las metas de sostenibilidad puede ayudar a tu empresa a generar good will con los clientes y las partes interesadas en apoyar a las empresas responsables.

Metas de proceso

Las metas del proceso son un tipo específico de meta empresarial que se centra en mejorar la eficiencia o eficacia de las operaciones de una empresa. Entre las metas comunes de proceso se encuentran la disminución del tiempo de ciclo, el aumento del rendimiento, el mejoramiento de la calidad o la reducción de costos. Las metas de proceso son esenciales porque ayudan a las empresas a mejorar su desempeño con el tiempo y a ser más competitivas.

Tipo de metas empresariales por periodos de tiempo

Hay tres metas empresariales que dependen del marco temporal previsto para la meta propuesta.

• Metas a corto plazo: previstas para alcanzarse en el curso de 2 a 3 meses.
• Metas a mediano plazo: concebidas para cumplirse entre unos pocos meses y 5 años.
• Metas a largo plazo: previstas para lograrse en cinco o más.

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Pasos para fijar metas empresariales

Las siguientes recomendaciones te ayudarán a establecer las metas perfectas para tu empresa.

Ten claro lo que quieres priorizar

Tu empresa tiene numerosas exigencias simultáneas. Para establecer las metas empresariales correctas, debes aclarar cuál de estas actividades es más importante y fijar tus metas en función de ello. Una manera de priorizar las actividades consiste en utilizar un análisis FODA. En este análisis, enumeras las fortalezas, oportunidades, debilidades y amenazas de tu empresa para decidir en qué áreas te debes enfocar.

Establece y considera diferentes tipos de metas

Piensa en los diferentes aspectos de tu plan de negocios, como los financieros, de participación de mercado o de producción. Crea metas para cada aspecto del negocio y compáralas entre sí. Por ejemplo, puedes fijarte la meta financiera al mes de aumentar los ingresos en $5,000, incrementar la participación de mercado 10% y aumentar la producción mensual en 50 unidades. Enseguida, compara estas diferentes metas y selecciona la que ofrezca el mayor beneficio. El objetivo que elijas debe ser específico para tu negocio. Entonces, si tienes una empresa textil, probablemente te beneficiarías más aumentando la producción mensual en 50 unidades. Esto no significa que las otras metas no sean importantes sino secundarias.

Establece objetivos alcanzables

Los objetivos de una empresa deben ser ambiciosos y un poco difíciles, pero realistas. No fijes metas que sabes que no podrás alcanzar. Por ejemplo, la meta de convertirte en el mayor productor textil del mundo en un año probablemente no sea realista. Una meta más alcanzable sería convertirte en el mayor productor textil de tu localidad. Establecer metas poco realistas anula el propósito porque te desmotivan a ti y a tu empresa.

Establece plazos realistas para cada meta

Establece un marco de tiempo para cada meta empresarial a fin de realizar un seguimiento de tu avance. Inicialmente, establece un cronograma para la meta general y luego subdivídela en varias metas más pequeñas con sus propios cronogramas individuales. Decide tus plazos utilizando evaluaciones realistas del tiempo y los recursos necesarios para alcanzarlas. Supongamos que deseas establecer una sólida presencia en línea de tu negocio. Esto lo puedes subdividir en varias metas más pequeñas, como el desarrollo de sitios web, anuncios en línea, marketing en redes sociales, etc.

Asegúrate de que todos en tu equipo conozcan cuáles los objetivos y sus respectivas funciones

La cooperación de tus empleados es esencial para alcanzar tus metas empresariales. Por consiguiente, ayuda mucho aclarar tanto las metas como la forma en que cada quien contribuirá a alcanzarlas. Por ejemplo, una de las metas empresariales iniciales podría ser aumentar tu participación general de mercado en un 30%. Primero debes informar esta meta a toda la empresa. Luego, debes asignarle a cada departamento una meta comercial que sea fácil de entender. A modo de ejemplo, podrías asignarle al departamento de ventas una meta de aumentar las ventas 20%. También puedes establecer un plan para que el área de producción aumente la fabricación en 100 unidades y así sucesivamente. Cada departamento necesita saber cuáles son sus tareas para trabajar en colaboración con otros departamentos para incrementar la eficiencia de las metas fijadas.

Ajusta tus metas según se necesite para mantener el rumbo

Es posible que tus metas sufran cambios con el tiempo y que tengas que ajustarlas. En ocasiones tendrás que cambiarlas porque ya no son realistas, como atraer nuevos miembros a tu gimnasio cuando hay una pandemia. En otros casos, tus metas son demasiado ambiciosas, como lograr una participación de 30% en un mercado con un nuevo actor empresarial. Sólo necesitas modificar tus metas cuando se vuelven imposibles. De lo contrario, terminarás desmotivado y te sentirás fracasado por no lograrlas cuando no había nada que pudieras hacer.

Método SMART para construir metas empresariales

Una plantilla SMART es una herramienta analítica utilizada para fijar las metas de una empresa. Te ayuda a crear metas de planes de negocios inteligentes para tu plan de negocios estratégico. Se utilizan asegurándote de que tus metas tengan las siguientes propiedades:

1. Específicas: Tu meta debe ser fácilmente definible, como lo es, aumentar los ingresos en un 30% en 2 meses.
2. Medibles: Tu meta debe ser objetivamente medible. Por ejemplo, se puede medir una meta de ingresos en términos de las ganancias obtenidas.
3. Alcanzables: Tu meta debe ser posible de alcanzar. Como, un incremento de 30% en los ingresos es posible si existe una gran demanda en el mercado.
4. Relevantes: Tu meta debe contribuir a los objetivos generales de tu empresa. Por ejemplo un aumento de 30% en los ingresos podría brindarle a una empresa textil la inversión que necesita para expandirse y lograr su meta general de ser la empresa textil más grande del área.
5. Con límite de tiempo: Tus metas deben tener un período establecido para cumplirlas, por ejemplo, 2 meses para un aumento en ingresos en un 30%.

Consejos para establecer las metas de una empresa

A continuación, presentamos algunos aspectos que debes tener en cuenta al fijar metas empresariales:

• Crea una lista de tareas o un plan de acción que te ayude a lograrltas
• Subdivide cada meta en pasos más pequeños y manejables
• Establece hitos realistas para cada meta
• Responsabilízate a ti mismo y a los demás del cumplimiento de los plazos
• Celebra cada logro obtenido en el camino, sin importar cuán pequeño parezca.

Diferencias entre objetivos y metas de una empresa

Las metas son objetivos estratégicos generales que desea tu empresa. Por el contrario, tus objetivos empresariales son los medios para lograr las metas. En términos generales, aunque parecidos no son lo mismo. Un objetivo empresarial es más específico que una meta. Las metas por lo general constan de múltiples objetivos empresariales. Por ejemplo, entre las metas podría aparecer el incrementar los ingresos mensuales. Esta meta podría lograrse mediante objetivos como aumentar las ventas de un producto en particular, adquirir cinco nuevos clientes semanalmente o reducir los costos en un 10%.

Ejemplos de metas de una empresa que puedes aplicar

Puedes utilizar estos ejemplos durante la estrategia de establecimiento de metas en una empresa.

• Incrementar los precios de los productos en un 3% durante los próximos tres meses.
• Contratar a tres nuevos empleados de marketing durante los próximos cinco meses.
• Aumentar el tráfico en el blog de tu empresa.
• Incrementar los ingresos en un 30% en los próximos dos meses.
• Mejorar la capacidad de producción en un 25% el año siguiente.
• Contratar a 50 nuevos empleados a nivel nacional.
• Conseguir 30,000 nuevos seguidores en Instagram en un mes.
• Desarrollar y lanzar tres productos nuevos.

Beneficios de tener un plan y objetivos estrátegicos para tu negocio